Porque se retira del mercado el alga cochayuyo(Durvillaea antarctica)

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No hay motivo alguno, ni sanitario ni legal, que impida objetivamente  la comercialización del alga cochayuyo (Durvillaea antarctica)

Sin embargo, la realidad es que, aunque sea absurdo e injusto, la comercialización del cochayuyo (Durvillaea antárctica) está prohibida por el Ministerio de Sanidad en nuestro país desde febrero de 2010 acogiéndose al reglamento 258/79 que se aplica a los nuevos alimentos e ingredientes alimentarios que no se hubieran comercializado en la UE antes de la aprobación de dicho reglamento (1997). Este no es el caso de esta alga que como ya hemos comunicado a Sanidad, aportando las pruebas correspondientes, ya se había comercializado en la UE, concretamente en Suecia desde 1980, por lo que no se le puede aplicar dicho reglamento.

Por otra parte y más insólito todavía es que acabamos de saber que como respuesta a la consulta efectuada en diciembre desde Chile al Ministerio de Sanidad Exterior de España sobre la posibilidad de comercialización del alga cochayuyo en nuestro país, este organismo les ha dado como respuesta oficial a través del Subdirector General de Sanidad Exterior que: No existe restricción para la importación y comercialización de “cochayuyo”, siempre que se trate de la especie Durvillaea antárctica, ya que el grupo taxonómico al que se encuentra adscrito dicha especie se encuentra contemplado en la legislación vigente.

Después de este comunicado oficial, como es lógico tanto desde Chile como desde algún organismo de la UE a los que se ha consultado dicen que no tiene porque haber ningún problema para la comercialización de este producto en España y desde luego parece evidente, pero desde la Administración, a la que llevamos meses pidiendo el levantamiento de la prohibición, no ha habido respuesta alguna y por tanto sigue vigente la absurda prohibición de la comercialización y consumo del alga cochayuyo.

Estamos a la espera de que en breve se solucione el problema.

Insistimos en que nunca ha habido ningún problema para la salud y que el problema ha sido únicamente burocrático y como podéis ver totalmente injusto. 

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ULTIMAS NOTICIAS OCTUBRE 2011

ALGA COCHAYUYO COMO FERTILIZANTE DE USO EN JARDINERIA DOMÉSTICA

No está permitido comercializar en España el alga cochayuyo como alimento. A partir de ahora se comercializará como fertilizante para uso en jardinería doméstica.

DEL USO DEL COCHAYUYO COMO ALIMENTO

Después de las últimas informaciones positivas de Sanidad Exterior (diciembre 2010), a las que habíamos tenido acceso, donde se citaba textualmente  (…) En relación a la importación desde Chile del alga denominada comúnmente “cochayuyo”, para consumo humano, se le informa de lo siguiente: No existe restricción para la importación y comercialización de “cochayuyo”, siempre que se trate de la especie Durvillaea antárctica, ya que el grupo taxonómico al que se encuentra adscrito dicha especie se encuentra contemplado en la legislación vigente (…), recibimos de nuevo la negativa de  AESAN (Agencia Española de Seguridad Alimentaria)para comercializar el alga cochayuyo como alimento, alegando que todavía no se ha demostrado su “consumo significativo” anterior a 1997. Como podéis ver este es un argumento estrictamente burocrático e interpretativo, que nada tiene que ver con la seguridad alimentaria ni con que el alga sea comestible (como lo evidencia su consumo desde hace siglos en otros países como Chile y desde hace muchos años en Europa, y el propio Diccionario de la Real Academia Española donde define el cochayuyo como alga comestible).

Recientemente hemos tenido acceso al expediente de todo este proceso y hemos podido constatar claramente la opinión de Sanidad Exterior al respecto (doc.1) y la posterior rectificación (doc.2) motivada por la postura de AESAN que es la que prevalece.

Se preguntaran porque en lugar de estar “luchando” tantos meses con la administración para que admitan que el alga cochayuyo es un alga comestible como reconoce Sanidad Exterior, no hemos hecho algo que puede parecer relativamente sencillo como es dar de alta esta alga como nuevo alimento tal como parece que exige el reglamento 258/97 que nos aplica AESAN. La razón es muy simple: este trámite sólo lo pueden hacer las grandes multinacionales porque tiene un coste de entre medio millón y dos millones de euros!!!.

Nos parece que cualquier reglamento o ley debería aplicarse con criterio, proporcionalidad y sentido común. No nos parece sensato, si de lo que se trata es de proteger la salud de la población, aplicar el mismo criterio a un producto creado artificialmente o transgénico a un producto natural que se ha consumido tradicionalmente en otros países. En este mismo sentido se manifestó el Sr. Llebaria (Director gerente de la APS, Agencia de Protección de la Salud) según un artículo publicado en el diario El País el 31 /08/10 (doc. 3)

Si se pusiera tanto empeño en proteger a los consumidores de tantos alimentos/aditivos /estimulantes potencialmente nocivos pero que reportan un volumen de negocio millonario seguramente estaríamos hablando de una población con muchos menos problemas sanitarios y por tanto con un presupuesto de sanidad notablemente más bajo. No desvelamos nada nuevo si decimos que según nuestra opinión muchas de las leyes no se hacen o no se aplican para proteger los intereses de los ciudadanos, sino otro tipo de intereses mucho menos “sociales”.

En el momento, si es que llega, en que esta alga pueda comercializarse como alimento porque las deliberaciones de los expertos en estos temas hayan concluido, se lo comunicaremos a través de esta misma página web y a través de medios públicos.

Mientras tanto les recordamos que ante la imposibilidad de seguir comercializando el cochayuyo como alimento, tal como informamos al inicio de este escrito, el alga cochayuyo se comercializará a partir de ahora en nuestro país como fertilizante natural para su jardín.

Podrán ver las propiedades e indicaciones de su uso como fertilizante en el apartado correspondiente (cochayuyo como fertilizante).

NOTA

Aunque pueda ser reiterativo, queremos dejar claro, para que nadie se preocupe por haber consumido esta alga como alimento, que en ningún momento ha habido ningún peligro para su salud, porque se trata de un alga comestible, simplemente hay un problema legislativo que no permite que se siga comercializando con esta finalidad.

Está claro que desde la Administración se va a controlar mucho lo que se diga y la propaganda que se  haga del producto para “vigilar” que no se induzca a engaño o confusión a los compradores (ojalá ese control y protección a los ciudadanos se aplique siempre con honestidad y con esa verdadera finalidad en todos los ámbitos). Justamente la finalidad de estas líneas ha sido la de intentar dejar las cosas claras para que no hayan dudas ni equívocos y esperamos haberlo conseguido. De todas maneras nos tranquiliza el convencimiento de que la mayoría de la población de nuestro país tiene el nivel de inteligencia y conocimientos suficiente como para no dejarse  confundir ni engañar. No creemos que dependan  del paternalismo protector de las administraciones para tomar sus propias decisiones con libertad, inteligencia y sentido común.

No haremos por supuesto propaganda de ningún tipo que fomente su uso distinto a ese fin, pero ¡ojo! avisamos también aquí a ustedes estimados clientes y a quien pueda leerlo incluida la administración que no tenemos ninguna responsabilidad sobre el uso que le den particularmente ¿Recuerdan el eslogan de una conocida cadena sueca que decía algo de “la republica independiente de su casa”? pues eso,  que no podemos ni pretendemos dictar órdenes de lo que ustedes, repito una vez más, hagan con su libertad y sus conocimientos.

Suponemos que esta página va a ser visitada por la APS (Agencia de Protección de la Salud) porque en el dossier correspondiente a nuestro expediente ya hemos podido constatar que les interesa su contenido y mediante correos internos a otros departamentos hacían recomendaciones de visitar esta página y leer su contenido y las explicaciones que se daban sobre este tema. No nos preocupa este hecho porque nosotros desde febrero de 2009 estamos acatando sus ordenes (aunque nos parezcan injustas y absurdas) no comercializando el alga cochayuyo y a partir de ahora continuaremos sin comercializarla como alimento, únicamente se comercializará como fertilizante para jardinería doméstica.

En cuanto a los contenidos de la página web se mantienen porque aunque aquí este producto no se pueda comercializar como alimento, si puede hacerlo en otros países y además la información  es internacional y mantiene una premisa que nos parece inalienable que es la ética, no contiene injurias ni falsedades y creemos que no produce confusión (hemos intentado explicar lo más claramente posible la situación). Aprovechamos para repetir, aun a costa de ser reiterativos, que en España, por el momento, únicamente se puede comercializar como fertilizante para jardinería de uso doméstico y es de la única forma en que la encontraran en el mercado o en las ferias.